Sabe que en el dejarse llevar hay mil opciones, y como no tiene nada que perder, hace lo que siente y huelgan las explicaciones…
Su única guía la tiene en las tripas, y aunque la mente le juegue malas pasadas y la atormente con deberías y tendrías, Ella no la escucha y se hace la distraída.
Cambia, elige, sigue, para un minuto y mira, camina, tropieza, se cae, se acomoda la ropa, llora y se ríe y todo a veces en el mismo día.
Sabe que la cautela es necesaria, pero no el miedo y cuando apaga las luces y se encuentra, escucha en silencio y observa.
Se mira, es Ella, y sonríe. Conoce sus secretos y los guarda, son sus semillas y las cuida.
Sus ojos verdes son un espejo.
(y su mirada sigue siendo un dulce misterio…)
3 comentarios:
Amo estos relatos tan tuyos. Son una ventanita por la que nos dejás espiar tu interior.
Hermoso
Me encanto mi mali. Te amo molto.
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