10 de diciembre de 2010

Son dos

Uno en cada hombro con distintas voces y distintos tonos, pero con las mismas urgencias, hablándole al mismo tiempo que discuten entre ellos.
Dos serios payasos que no paran de moverse y de hacer ademanes con las manos y mil gestos con las caras.
Saltan y gritan y la cansan hasta llevarla a un punto de hastío que la hace sentar en el último escalón de madera gastada y poner la cabeza entre las manos, tratando de taparse los oídos para no escucharlos, mientras ellos le enmarañan sin remedio el pelo con los pies.
No los aguanta, sus voces alborotan sus sueños y aturden su calma sin remordimiento haciendo de su día un eterno martirio sin su consentimiento.
Y mientras ellos siguen su eterna disputa, Ella se levanta, los deja y se va.

Ahí están, son dos corsarios peleando en su cielo
haciendo ademanes y enmarañando su pelo…

Ella, el Bien y el Mal

1 comentario:

Adriana Fernandez dijo...

Son dos? La maraña es interna. Qué buenas imágenes en pocas palabras.