27 de agosto de 2013

Intemporalidad

Camina relajada. No hay anteojos, taco aguja ni lluvia, sólo pura soltura.
El viento borra los pasos que ella deja en la arena blanda, como se borran para siempre los segundos cuando pasan.
No hay una forma, no hay palabras y sí un sentido imperceptible y casi tímido que le muestra que la manera concreta no existe, porque en este lugar no hay espacio para la lógica, ni para las letras o las voces dando explicaciones.
Lo que siente no se ve ni se toca, al fin lo insustancial es lo que mueve las cosas y las acomoda.
Y así, sin pausa ni medida cierta, el sutil intemporal presente, va dibujando y desdibujando esta pintura, y el viento se la va llevando, sin prisas y con toda soltura, como se lleva las huellas que ella va dejando en la arena.

No hay comentarios: