23 de abril de 2023

Procesos

Diez de la noche, pijama negro, uñas blancas y sintiendo cómo una frase trillada y armada vaya a saber con qué objeto, va rebotando de un lado a otro de mi cabeza captando toda mi atención y llevándome inexorablemente a esta reflexión.
“Es un proceso” hoy se lleva el galardón, y a continuación me pregunto: ¿cuándo estoy pasando por un proceso, a la vida en dónde la dejo? y ¿cuál sería, en el caso de existir un proceso, el producto final de la secuencia?
Usamos en automático palabras sin cuestionárnoslas, y así es como creemos que lo que estamos viviendo es un proceso, y vamos saltando de uno al otro, porque convengamos que nos pasan un montón de cosas todo el tiempo, creyendo que la vida está en algún lado esperándonos para abrazarnos y llenarnos de besos.
No hay procesos señores, hay la vida con todo lo que es, en una interminable concatenación de “sucediendos”, buenos, malos, lindos o feos, pónganle los adjetivos que quieran, pero por favor se los pido, no le pongan proceso.

1 comentario:

Anónimo dijo...

La vida misma es un proceso y como tal; debería llegar a un fin.