16 de diciembre de 2011

Ira, furia, fundamento y sustancia

Está todo teñido de rojo, sus ojos, sus puños, el cielo, los verdes, la madera, la arena, la noche, lo que toca, lo que mira y hasta el aire que respira.
Siente que la ciega una cortina de sangre y un río enloquecido la lleva a la pelea y a la venganza porque hoy, Ella toda, es ira y furia con sustancia.
No quiere detenerse, ya se hartó.
Acaba de barrer de un solo manotazo el paño verde, y las cartas volaron por el aire como plumas yendo a parar a cualquier lado. No le importa nada, y carta que encuentra, carta que patea, rompe y quema.
La mesa es un despojo de maderas desparramadas y la silla en la que estaba sentada es una pira funeraria en el centro de la sala…
Dicen que la venganza es un plato que se come frío, pero Ella sabe que no tiene gusto a nada. Por eso eligió la furia, la sangre, la ira, la caída sin escalas, el abismo y los pedazos…

No hay lugar más sano que el fondo del pozo
para apoyar los pies
y dar el salto

2 comentarios:

Edson Hernández dijo...

Wooooow, llevo leyendo tu blog hora y media y no me canso, perfecto por escribirnos :)

Adriana Fernandez dijo...

Mi viejo decía que lo mejor es tocar fondo y de golpe. Así, uno tiene la oportunidad de agacharse y tomar impulso.